ADIÓS HORMIGUITAS, HOLA HORMIGUITAS

    Primera entrada del curso, entrada que tenía que llevar este título tan significativo. 

  La vida es un continuo caminar en el que se cierran ciclos, en esos momentos  es inevitable que aparezcan la nostalgia y la tristeza... aún a sabiendas que  es condición indispensable para abrir otros nuevos en los que las ilusiones y expectativas que cumplir siempre ganan la batalla para seguir avanzando.

   He esperado a hoy, 12 de septiembre, como punto de inflexión, para despedir a las hormiguitas que se van al instituto y, al mismo tiempo, para dar una bonita bienvenida a las nuevas sonrisas que llenarán el vacío que éstas nos dejan.

   Esta mañana ambas "generaciones" se han unido, como ya viene siendo tradicional, porque tengo que recordar también el día en el que mis "figarillas"  vinieron a manifestar el orgullo de ser y sentirse hormiguitas a los que hoy se van,  para compartir unos momentos que siempre resultan especiales y únicos a los ojos de a quien esto escribe.

   Hasta luego hormiguitas, seguro que os va a ir muy bien en vuestra nueva etapa, también vosotros abriréis y cerraréis ciclos en una vida que se me antoja que escribiréis apasionante, tened la seguridad que siempre, siempre, llevaréis guardado en el corazón esa brisa de aire fresco que surgía cada mañana cuando todos construíamos mil historias increíbles arremolinados en nuestro rinconcito del Carmen. ¡¡Sed felices!!.

  Hola hormiguitas, bienvenidas a vuestra nueva casa. Una vez oí, y escribí, que el veintitrés es un número mágico, los que me conocen saben del significado que tiene esa palabra para mí, gracias a ella hemos "enreado" tanto y tanto, verdad?, y digo esto  porque de nuevo son veintitrés las hormiguitas que se asoman a nuestra ventana para seguir el sendero que otras nos dejan. 

   Aquí os las presento, con la seguridad de que pondrán el listón lo más alto posible llenando con miles de páginas esta ventana que de nuevo se abre, para que, dentro de un par de añitos, todos nos sintamos muy satisfechos de cómo llevan con orgullo el testigo que hoy recogen.

¡¡BIENVENIDAS, HORMIGUITAS!!